La fiesta de la vendimia de Raimat

Hace apenas un mes que la vendimia en todas las bodegas españolas se ha dado por terminada. Este proceso, que se alarga durante varias semanas dependiendo de las condiciones climáticas y de la cantidad de fruto que se debe extraer, culmina con la selección de las mejores uvas, que, a su vez, simbolizan el éxito de una campaña de recolección que tiene que ver con el cuidado de las cepas en relación con el ciclo de la vendimia, que se repite cada año.

Raimat es una bodega conocida por ser de las primeras de toda Europa en empezar la vendimia, pues aunque lo usual es iniciar la temporada a principios de septiembre, en Raimat comienza a principios de agosto. La cosecha se realiza manualmente y por la noche, lo que garantiza la frescura y conservación de las propiedades del fruto. Con el objetivo de conmemorar su historia y celebrar el éxito de una vendimia que, año tras año, garantiza la excelente elaboración de sus vinos, Raimat celebra la “Festa de la Verema”.

Los orígenes

La fiesta de la Vendimia de Raimat halla sus inicios en el 1988. Sin embargo fue mucho antes, a partir de los años 30 cuando se empezó a vendimiar las uvas de la propiedad. Esto no sólo simbolizó el inicio de la elaboración de sus vinos, sino que también supuso el descubrimiento de un gran problema: los conejos, que se comían los brotes de las viñas.

Con el objetivo de frenar la plaga de estos animales así como los destrozos que podían llegar a ocasionar a largo plazo en sus cepas, se estimuló la caza de conejos en los pueblos vecinos hasta tal punto que se hizo famoso un plato llamado "conejo a la Raimat". Al no ser suficiente esta medida, se introdujo una especie de serpiente australiana inofensiva para los humanos, de las que actualmente todavía se pueden encontrar ejemplares que se han aclimatado.

La celebración

A raíz de este hecho, Raimat celebra la Fiesta de la Vendimia el mes de septiembre. En la fiesta, los invitados prevén el éxito de una vendimia magnífica vestidos con los trajes tradicionales de época. Entre los muchos actos que se llevan a cabo, se celebra el concurso de “piada” o pisada de la uva y se presentan los vinos jóvenes del año, con su posterior proceso de cata del mosto. También se representa el acto teatral de la Serpiente y los conejos, con una enorme serpiente de cartón y metal que conmemora la introducción en Raimat de estas serpientes australianas para frenar la plaga de conejos.

Así que ya sabéis, si queréis disfrutar de una fiesta tradicional y conmemorativa, a la par que visitar una de las mayores fincas vitivinícolas del territorio, no tenéis más que acudir a las bodegas Raimat.